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El Parlamento aprueba la Ley de la Arquitectura

El miércoles 28 de Junio del 2017, el Parlamento de Cataluña aprobó la Ley de la Arquitectura, que pone en valor su interés público, asegura la preservación como patrimonio cultural y social, y la distingue como instrumento fundamental para garantizar el bienestar de las personas.

Es el primer texto legislativo de este tipo al Estado y el segundo de Europa, después del que aprobó Francia el 2016. El Gobierno ha impulsado esta nueva legislación siguiendo las diversas resoluciones y recomendaciones de la Unión Europea que aconsejan fomentar la calidad arquitectónica y destacar el valor añadido que aporta el sector, tanto desde la vertiente económica como cultural. En este sentido, el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull ha detallado que la arquitectura, “constituye un elemento clave para interpretar nuestra historia y su calidad define las oportunidades futuras de colectivos e individuos”.

Se trata de una Ley que no incide en la ordenación de la edificación ni en las competencias profesionales de los varios colectivos implicados, dado que estos aspectos tienen sus propios marcos normativos. Aspira, en cambio, a velar por la calidad de todos aquellos espacios donde se desarrolla la actividad humana.

La Ley quiere cambiar la situación que se ha dado los últimos años, con una “creciente priorización de los aspectos económicos, materiales y normativos” en los concursos de adjudicación de obra pública y hace prevalecer los criterios cualitativos, la dimensión cultural y las consideraciones medioambientales y sociales. “Queremos romper la tendencia de priorizar los aspectos económicos sobre los cualitativos”, ha defendido el conseller.

Fruto de la tramitación parlamentaria, donde nuestro Colegio presentó alegaciones que fueron recogidas en el texto definitivo, se ha reforzado el sentido colectivo del proceso arquitectónico. La Ley enfatiza repetidamente que la creación de una obra arquitectónica es el resultado de la participación de profesionales de varias disciplinas y pone en valor esta pluridisciplinariedad. Ni la Ley ni su posterior reglamento acotaran cuáles son los perfiles profesionales que tienen que intervenir en la creación arquitectónica

El texto legislativo, que se estructura en 22 artículos y tres capítulos, apuesta por el fomento y el reconocimiento de la arquitectura, contribuyendo a sensibilizar la ciudadanía hacia la relevancia de esta disciplina. Así, se crean los Premios Cataluña en el ámbito de la Arquitectura y del Patrimonio Construido para reconocer las mejores aportaciones de cada año, y también nace el Consejo de Calidad Arquitectónica y Urbanística de Cataluña como órgano asesor del Gobierno.

La Ley también establece la composición y funcionamiento de los jurados de los concursos de ideas y de proyectos para garantizar una presencia pluridisciplinar y la valoración de los aspectos cualitativos de las propuestas en los procesos de contratación.

La Ley, ha resumido el consejero, “es inclusiva, modernizadora y sostenible”, que defiende una “visión completa del ciclo de construcción” y que comportará “un ahorro económico en la construcción y explotación de los edificios”.

La Ley de la arquitectura forma parte del “replanteamiento de los instrumentos” de ordenación territorial y urbanística que impulsa el Departamento de Territorio y Sostenibilidad “para adecuarnos a un cambio de paradigma” que prioriza el desarrollo sostenible. El máximo exponente de estos nuevos instrumentos será la Ley de territorio. Esta nueva legislación pondrá los fundamentos de una nueva manera de entender la planificación territorial, con la sostenibilidad y la rehabilitación como base del desarrollo.

En el debate parlamentario asistieron el director general de Ordenación del Territorio y Urbanismo, Agustí Serra, nuestro Decano, Xavier Font y Mach, y representantes de los varios colegios profesionales.

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